Son espectáculos en los que el mago está entre un público normalmente reducido, rodeado de la atenta mirada de los espectadores. Todo ocurre a corta distancia alrededor de una mesa, en un ambiente íntimo, en un salón…
De esta forma los espectadores asistirán a una magia íntima e impactante que nunca se les podrá olvidar: “¡¡¡la tenía en mi manoooo, y se transformó!!!”; por no decir algo malsonante estilo: “¡¡¡cómo “…” lo ha hecho!!!”.
Son ocasiones únicas para vivir una experiencia inolvidable: la magia, desde tan cerca, parece más real.